Ilustres
en la Biblioteca Nacional José Martí: María Elena Jubrías en el departamento de
Arte
Por:
Mabiel Hidalgo Martínez
María
Elena Jubrías comenzó joven en la Biblioteca Nacional José Martí (BNJM), apenas
cuando iniciaba su tercera década de vida. Durante seis años dirigió el
departamento de Arte de la institución, etapa que abrigó entre sus mejores
recuerdos, como expresara “(…) por la intensidad de una experiencia formadora
en aquellos días de cambios trascendentales”.[1]
Al
frente de un grupo también de jóvenes talentosos, entre los que vale mencionar
a Oscar Morriña, Luz Merino Acosta y Ricardo Gallardo, cual tropa de aprendices
trabajadores anónimos creció en el orden profesional, al tiempo que dejó su
impronta en el tercer piso del edificio. Si se repasa la colección de
fotografías BNJM observamos a la doctora Jubrías impartiendo una conferencia en
el Salón de actos como parte del ciclo “Las artes a través de los tiempos”, en
los llamados Jueves de Arte que tan
importante acogida y provecho tuvieron en el público lector; o entre usuarios y
especialistas, llevándolos por el camino de la apreciación de las artes
plásticas.
Durante
sus años en la Biblioteca tuvo a su cargo la organización de decenas de
exposiciones, algunas tan memorables como la primera muestra retrospectiva de
la obra de René Portocarrero, en 1960; las pinturas de González Puig; las
acuarelas de Samuel Feijóo; los dibujos de Marcelo Pogolotti; los grabados de
Lam, entre otras actividades que apostaban por la formación cultural y la defensa
del arte cubano y universal. No menos relevantes fueron sus aportes a la
organización de los departamentos de arte de las Bibliotecas Provinciales.
Fue
María Elena Jubrías quien le explicó al Comandante Fidel Castro -a petición de la
subdirectora Maruja Iglesias- la variedad de actividades del departamento de
Arte. El recorrido se realizó luego de las reuniones con los intelectuales que
tuvieron lugar en la Biblioteca Nacional, en junio de 1961. Cuenta Maruja que
Fidel se quedó mirando desde el mostrador la exposición de las reproducciones
de la vanguardia de pintura europea y expresó cuánto sentía que no le hubieran
enseñado la apreciación de las artes.[2]
Su
labor como crítico de arte, investigadora, ceramista, Profesora Emérita de la Universidad
de La Habana será recordada por artistas, investigadores, alumnos y colegas. En
la Biblioteca Nacional de Cuba José Martí engrosa la lista de cubanos ilustres
que son parte de su historia.
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